Llega la hora de dormir, y cada día tenemos el mismo problema: no sabemos si dejar subir al perro a la cama por el sinfín de comentarios negativos que hemos escuchado al respecto, que si no es higiénico, que si vuelves a tu perro agresivo y dependiente, que si afecta a nuestro descanso, etc.
Los perros son miembros de la familia, de ahí que sus amos sientan la necesidad de cuidarlos y darles cariño. Para muchos, dormir con su compañero de cuatro patas no es algo discutible, es algo que simplemente hacen porque los vínculos que estrechan cuando están juntos van mucho más allá de todos esos comentarios que no recomiendan este hábito que a mi parecer, no es algo descabellado. Al fin y al cabo, estamos hablando de dejar subir al perro a una cama que es vuestra, y como vuestra que es, siempre seréis vosotros quienes pongáis las reglas que consideréis oportunas.
Es decir, como siempre digo cada vez que me preguntan sobre puedo o no puedo dejar a mi perro subir a la cama o al sofá; Para mí no se trata de normas establecidas, se trata de decidir cuando si y cuando no, y esos tiempos debemos de marcarlos nosotros, no el perro, siendo la única norma establecida, la de que "el perro te pida permiso con la mirada o con algún gesto corporal, quedando a la espera de tu decisión" (autocontrol del perro y control del guía).
Pero vayamos por partes. En este post voy a analizar los puntos que recomiendan no dejar subir al perro a la cama para, finalmente, hacer una valoración sobre cuál es el estado de la cuestión, y si dejar subir a nuestro perro a la cama puede llegar a suponer un gran peligro para vuestra salud o la suya.
Pues no, no es higiénico, como tampoco son higiénicas muchas otras prácticas que mucha gente realiza sobre la cama, como comer mientras ve la TV, echarse la siesta con ropa de calle, irse a dormir sin darse una ducha...
Hay millones de actitudes poco o nada higiénicas que hacemos día a día y acabamos trasladando a nuestra cama. Evidentemente, dejar subir a nuestro peludo, sabiendo que sus patas pueden contener ácaros y suciedad de la calle, es una de ellas. Pero vaya, si nuestro perro está sano, al día con todas sus vacunas, desparasitado, lo cepilláis a menudo y los laváis, no tiene por qué pasar nada peligroso. Nunca nadie murió por ello, y según una encuesta realizada en Reino Unido por Mark Evans, aproximadamente la mitad de los encuestados (23.000 dueños en total), reconocen dormir con sus mascotas.
Si bien es cierto, en el caso de que los perros no cumplan con sus cuidados médicos y no mantengan una higiene adecuada, puede haber riesgos para la salud, como algunas respuestas inmunológicas, alergias, neumonitis por hipersensibilidad o asma. Los niños, mujeres embarazadas o pacientes que son inmunodeficientes, son más susceptibles.
Hay millones de actitudes poco o nada higiénicas que hacemos día a día y acabamos trasladando a nuestra cama. Evidentemente, dejar subir a nuestro peludo, sabiendo que sus patas pueden contener ácaros y suciedad de la calle, es una de ellas. Pero vaya, si nuestro perro está sano, al día con todas sus vacunas, desparasitado, lo cepilláis a menudo y los laváis, no tiene por qué pasar nada peligroso. Nunca nadie murió por ello, y según una encuesta realizada en Reino Unido por Mark Evans, aproximadamente la mitad de los encuestados (23.000 dueños en total), reconocen dormir con sus mascotas.
Si bien es cierto, en el caso de que los perros no cumplan con sus cuidados médicos y no mantengan una higiene adecuada, puede haber riesgos para la salud, como algunas respuestas inmunológicas, alergias, neumonitis por hipersensibilidad o asma. Los niños, mujeres embarazadas o pacientes que son inmunodeficientes, son más susceptibles.
Cuando nuestro peludo duerme en la cama con nosotros, es posible que nos de alguna patada, que ronque, o que se despierte y se mueva. Para muchas personas, estas interrupciones del sueño pueden intervenir negativamente en su calidad. Asimismo, es probable que los desajustes de temperatura entre los humanos y los perros puedan resultar también en un punto en contra a la calidad del sueño.
No obstante, los estudios que se han realizado al respecto, no han sido capaces de determinar el impacto real de estas interrupciones, que en realidad son muy cortas, y por la misma regla de tres, también nos puede ocasionar nuestra pareja.
Se vuelven dependientes
Muchos expertos afirman que en realidad el único punto realmente negativo es aquel que tiene que ver con la conducta que adquiere animal cuando le permitimos subir a la cama para que duerma con nosotros, YO NO ESTOY DE ACUERDO.
Me explico. A nivel instintivo, los pseudo-educadores, dicen que el líder de la manada siempre duerme en la zona más alta para proteger a los suyos. Así que según esta teoría, si permitimos que nuestro colega duerma con nosotros, puede interpretarlo como un poder que le damos para adquirir con el tiempo conductas de dominancia, posesión y liderazgo. MENTIRA.
Sin embargo, tambien se dice que pueden llegar a experimentar un aumento en la agresividad, o problemas relacionados con la separación, y es cierto, pero no solo por subirse a la cama, más bien por humanización y falta de normas y disciplina. Por lo que ante este punto, es importante remarcar que, como todo, la conducta que adquiera nuestro perro dependerá de la dedicación y la educación que le brindemos desde el principio.
Entonces, ¿les dejamos dormir con nosotros o no?
Un riguroso estudio realizado por Bradley Smith sobre las implicaciones de la convivencia humano-animal acabó abogando por el sentido común: aunque es probable que interfiera negativamente en la calidad del sueño y no sea la práctica más higiénica del mundo, la práctica continuada del colecho con mascotas indica beneficios de interacción social, seguridad personal y apoyo social.
Dicho de otra forma, dormir con nuestras mascotas puede tener efectos muy positivos si nuestra relación con ellos es sana y reconfortante. Lo único que deberemos tener en cuenta, es que el perro debe estar sano y mantener una higiene adecuada, y por otro lado, también debe entender que si sube es porque nosotros se lo permitimos.
Y vosotros, ¿Dejáis subir al perro a la cama?, ¿Qué opinión tenéis?