Y acabamos con la modificación de conducta de Wicca!!!
Esta última sesión hemos paseado durante dos horas. La primera en semilibertad y la segunda en libertad absoluta.
Wicca ya no ladra a otros perros, su reactividad ha desaparecido por completo. Ahora sabe comunicarse, presentarse y jugar con otros congéneres disfrutando de ser una perra feliz.
El vínculo está más que fortalecido. Su autocontrol es de sobresaliente y el control de sus propietarios es amable, justo y respetuoso con su bienestar animal.
Me encanta Wicca! Seguiremos ahora trabajando en el grupo de trabajo de obediencia y socialización. Así que esto no es un adiós.
Gracias Julio y Silvia por confiar en Vivir en Manada. ENHORABUENA por todo el trabajo realizado