Comenzamos con Peluxe, un Mix de Pastor Belga Malinois de 1 ańo.
Su propietaria pensaba que tenía graves problemas. Pero tras la primera hora de trabajo, los problemas no aparecían y su propietaria no reconocía el comportamiento de su perro para conmigo.En muchas ocasiones, me encuentro con una falta de manejo y control bastante elevada sobre los propietarios.
No hace falta hablar, ni gritar, ni manipular, ni reńir... y así lo demuestro en todas las sesiones. Simplemente hay que ser más perro y buscar la conexión.
Cuando un perro no se siente comprendido, acumula estress, ansiedad, nerviosismos... incluso reactividades sociales.
Sigo defendiendo la idea de que todo propietario debe pasar por las manos de un educador que le programe unas pautas de convicencia justas para ambos, que aprenda a encontrar el equilibrio, a trabajar el vínculo y a comunicarse con su perro.
No son tantos los problemas de los perros como los que sus humanos infunden por falta de conocimiento.
Peluxe se ha portado genial! Ha sido un perro diez! Y ha demostrado a su propietaria que tiene ganas de ser comprendido y de ser un buen perro.
Seguiremos trabajando para que su propietaria aprenda a comunicarse con él y pueda disfrutar del gran perro que tiene.
Gracias Mati por confiar en Vivir en Manada
