Tras cuatro sesiones individuales para rehabilitar su conducta reactiva en fase roja hacia humanos y perros, hoy Koko se ha incorporado a uno de los grupos de socialización de la escuela, tras pulir durante casi un mes muchos aspectos y parámetros mentales.
Se ha “tragado” literalmente a más de 30 perros en dos turnos, para acabar en libertad con 5 perros en un recinto cerrado de 400m.
Muy orgulloso de sus progresos, y muy orgulloso del trabajo y las pautas seguidas de sus propietarios David, Manoli y como no, de su hija Sandra (una entusiasta del mundo del perro)
Tenemos a Koko a punto de afinarlo!!!.
Mil gracias a su familia por confiar en Vivir en Manada.
Seguimos!!!
Seguimos!!!