Segunda sesión con Blue!!! Un mix de PDAE y Breton que tras evaluarlos la semana anterior, concluí en miedo e inseguridad… pero con 7 meses… y eso, es plastilina…
Con esa edad es muy fácil moldear la mente de un perro. Blue tenía un ladrido descomunal, constante, imparable e incansable. Ladraba a todo (por miedo), su comunicación con otros perros era nula (no sabía su idioma)…
En tan solo una semana y dos sesiones… Blue es otro perro y así me lo aseguran sus propietarios y hoy, me lo ha demostrado con creces.
En una primera sesión (la pasada semana), Blue no mostró de ladrar durante más de dos horas… no me dejo tocarlo, era un perro ido.
Hoy, Urko ha sido quien como siempre le ha enseñado los primeros pasos de comunicación y confianza. Para luego unirse Opi (Pastor Aleman con reactividad alta rehabilitado por mí desde hace un año y hoy día tutor de la escuela), actuando como
siempre de sobresaliente, ayudando a sus congéneres para eliminar los problemas que el antes tenía.
Agradecer a mi hijo Javier su colaboración como siempre a mi lado. Cada día más mayor y aprendiendo un poco más. Blue no se separaba de su lado.
Blue, ha llegado a finalizar comiendo de mis años junto a otros perros e incluso boca con boca. No se ha escuchado ni un ladrido insolente, exceptuando los de comunicación, obviamente.
Este viernes se va a incorporar a un grupo de socialización de cachorros para que aprenda a relacionarse mejor y saquemos el máximo partido de este cachorro para seguir avanzando en su educación con nuevas metas y objetivos.
Mil gracias a su propietaria Oriana por confiar en Vivir en Manada.
En tan solo una semana y dos sesiones… Blue es otro perro y así me lo aseguran sus propietarios y hoy, me lo ha demostrado con creces.
En una primera sesión (la pasada semana), Blue no mostró de ladrar durante más de dos horas… no me dejo tocarlo, era un perro ido.
Hoy, Urko ha sido quien como siempre le ha enseñado los primeros pasos de comunicación y confianza. Para luego unirse Opi (Pastor Aleman con reactividad alta rehabilitado por mí desde hace un año y hoy día tutor de la escuela), actuando como
siempre de sobresaliente, ayudando a sus congéneres para eliminar los problemas que el antes tenía.
Agradecer a mi hijo Javier su colaboración como siempre a mi lado. Cada día más mayor y aprendiendo un poco más. Blue no se separaba de su lado.
Blue, ha llegado a finalizar comiendo de mis años junto a otros perros e incluso boca con boca. No se ha escuchado ni un ladrido insolente, exceptuando los de comunicación, obviamente.
Este viernes se va a incorporar a un grupo de socialización de cachorros para que aprenda a relacionarse mejor y saquemos el máximo partido de este cachorro para seguir avanzando en su educación con nuevas metas y objetivos.
Mil gracias a su propietaria Oriana por confiar en Vivir en Manada.
