Sesión de socialización para Nala con mis perros y Lobo.
Después de sus primeras sesiones para modificar su conducta, necesitaba verla interactuar con otros perros. Nala es hiperactiva a nivel Dios, juega demasiado de frente desde el inicio del ritual. No lee las señales de calma de sus congéneres, no sabe interactuar correctamente; demasiado acachorrada (aun siendo adulta), no entiende las correcciones, advertencias o avisos del resto, pero es todo un AMOR.
Tiene un fondo espectacular, es una vivaracha intrépida y muy atrevida, incansable e insaciable, pero incapaz de enfrentarse a nadie, muy lejos de querer meterse en problemas… simplemente, es intensa y tiene falta de socialización (debe aprender de otros perros).
Nala se va a incorporar a uno de los grupos de obediencia y socialización de la escuela para que podamos trabajar esos aspectos y pulir más su modificación de conducta.
Gracias Ana por confiar en Vivir en Manada