No ha podido ir mejor. Hemos paseado súper a gusto desde el minuto 5 del comienzo. Ha sido poner orden en la formación de manada, informar a los perros y surgir el buen rollo.
Enzo ha caminado sin dar tirones a mi lado. Nos hemos cruzado unos 5 perros y no ha saltado con ninguno, excepto con un intrépido labrador chocolate que al rato de estar oliéndose en sus presentaciones, cruzaron una mirada equivocada y saltó una pequeña chispa que fue reconducida sin dificultad alguna.
Por lo demás, un paseo excepcional. Aún nos queda seguir trabajando con su propietaria para que adquiera el manejo y control de sus perros. Por eso, Enzo y Orión, han comenzado ya en uno de nuestros grupos de obediencia y socialización.
Gracias Manoli por confiar en Vivir en Manada
Enzo ha caminado sin dar tirones a mi lado. Nos hemos cruzado unos 5 perros y no ha saltado con ninguno, excepto con un intrépido labrador chocolate que al rato de estar oliéndose en sus presentaciones, cruzaron una mirada equivocada y saltó una pequeña chispa que fue reconducida sin dificultad alguna.
Por lo demás, un paseo excepcional. Aún nos queda seguir trabajando con su propietaria para que adquiera el manejo y control de sus perros. Por eso, Enzo y Orión, han comenzado ya en uno de nuestros grupos de obediencia y socialización.
Gracias Manoli por confiar en Vivir en Manada